Sobre Cumen
CUMEN S.L. es una empresa especializada desde hace más de 45 años, en la fabricación de los tan antiguos, auténticos y clásicos morteros de cal, estucos y jabelgas.
Todos los edificios que nos rodean construidos hace más de medio siglo, están labrados y revestidos con estos materiales, por lo que no existen morteros más experimentados y con más garantías empleados durante siglos, desde principios de la construcción.
Sobrecoge pasear por el interior de una catedral y mirar hacia arriba, contemplando sus altas bóvedas y considerar como los pesados sillares que las componen, unidos con mortero de cal, se hallan suspendidos salvando grandes luces sin caerse y evitando que penetre el agua de lluvia, a través de sus llagas de unión. Quedando así perfectamente impermeabilizadas durante siglos sus grandes bóvedas y con la elasticidad precisa, necesaria para conseguir la estabilidad de los monumentales muros y de todos los elementos de sillería.
Muchas de estas cualidades se han olvidado, empleándose actualmente nuevos productos que consiguieron apartar el uso de la cal hace aproximadamente 70 años, cuyo aspecto es tan desagradable, que no se dejan vistos, se procura tapar rápidamente para no verlos con pintura plástica, que pasado un tiempo hay que volver a pintar cuando aparecen los antiestéticos desconchones, que cual ventanas a través de ellas, se vuelve a ver el revestimiento de cemento.
Así pues se observa como muchos de los nuevos productos utilizados en la construcción, no han dado los resultados deseados, por ello se buscan, se estudian, las soluciones, que sin embargo siglos pasados estaban ya resueltos con los morteros de cal y que cuyos resultados vemos y a la vista están en tantos edificios, construidos a través de los siglos. Pero esto no se tiene en cuenta, pues se ha olvidado hoy totalmente.
Los técnicos de la empresa CUMEN, hace muchos años planificaron la elaboración de estos morteros en nuestra industria, de modo tal, que estos antiguos materiales se suministran a obras hoy ya preparados secos y envasados en sacos, y tan sólo hay que amasarlos con agua potable, como cualquier otro mortero de los actuales que están apareciendo,
Tipos De Cales
La palabra “cal” expresada en el lenguaje coloquial como denominación genérica tradicional, es clasificada según requisitos relativos a sus propiedades químicas y físicas en varios tipos de cales.
Cales aéreas, se obtiene por la calcinación de rocas calizas puras que no contengan más de un 5% de materiales arcillosos. Cuando son muy puras en carbonatos, reciben el nombre de cales grasas, si la pureza en carbonatos es menor y el contenido en arcillas llega hasta el 5%, se denominan cales magras.
Nuestros morteros elaborados con cal de gran pureza, van endureciéndose o carbonatando poco a poco hasta convertirse en una costra pétrea que se hace cada vez más resistente. En este proceso, el hidróxido de calcio al entrar en contacto con el anhídrido carbónico gaseoso existente en nuestra atmósfera se transforma en carbonato de calcio (CaCO3), es decir, retorna a ser la piedra con la que se iniciaba el ciclo antes de su calcinación.
Nuestros morteros, cuya materia principal es la cal aérea, tienen la particularidad de ser permeables al vapor de agua (aunque no al agua) permitiendo la transpirabilidad de los muros o paredes, otorgando cualidades higroscópicas para regular la humedad de los ambientes. Con la cal aérea conseguimos un mortero de excelente nivel de permeabilidad al vapor de agua, originando la salida del interior del muro al exterior en forma de vapor, evitando acumulaciones internas por condensación.
Cales hidráulicas, se denominan así por su especial comportamiento al endurecer en contacto con el agua, comunicándoles impermeabilidad a las superficies de los paramentos. Desde época romana era utilizada en todas aquellas construcciones que había que preservarlas de la acción negativa del agua y humedades como son puentes, acueductos, acequias en huertas y cisternas, asegurándose así su estanqueidad. Éste tipo de cales se consideran impuras por proceder de canteras en que la caliza contiene arcillas ricas en sílice, aluminio y hierro. Existen varios tipos que dependiendo de su composición se pueden clasificar de la siguiente manera: cales débilmente hidráulicas, con un contenido entre un 10 y un 15% de sustancias que le proporcionan hidraulicidad; las moderadas o propiamente hidráulicas con un 15 a un 20% de arcillas y aluminio, y las eminentemente hidráulicas que contienen más de un 20%.
Todas ellas tienen comportamientos y resultados diferentes que vienen determinados en la Norma Europea UNE-EN 459-1 “Cales para la construcción”, donde podemos encontrar los diferentes tipos de cal de construcción así como su clasificación.